Cambios en el concepto de vivienda


Cuando la entonces ministra de Vivienda, Mª Antonia Trujillo, habló de “soluciones habitacionales”, dio mucha risa. Esta ministra fue un desastre y no me gusta nada su gestión. Pero en este punto creo que no andaba descaminada. Plantear que todo el mundo tiene que tener una vivienda nueva y moderna, de unos 70, 80 ó 90 m2, con todas las instalaciones, bien situada, etc., y que a quien no pueda pagársela por sus medios se la debe proporcionar el estado es, creo, un absurdo. ¿Para qué vale decir algo así? ¿Alguien piensa que tal propuesta es medianamente viable, aunque sea a medio plazo? Plantear las cosas de esa manera es insistir en que todo siga como está. Claro que, por otra parte, peor está no pensar siquiera en ese tipo de propuestas, y dar por hecho que hay gente que no tiene derecho a la vivienda.

¿Qué tenemos sobre la mesa? ¿Qué nos proponen unos y otros sobre la vivienda? Sin ánimo de plantear un análisis completo y pormenorizado, sino sólo de ver cómo están las cosas y plantear vías de actuación, veamos. Consultemos, en primer lugar, las ideas que tienen publicadas PP y PSOE. El primero, sintético y ordenado, lo resume en 13 puntos (4 de análisis, 9 de propuestas), que a su vez vamos a resumir aquí aún mas. Propone: 1º) construir 200.000 VPO/año. 2º) Gravar las viviendas vacías. 3º) Impulsar el alquiler. 4º) Ayudar al pago de las hipotecas (básicamente mediante estímulos fiscales). Y 5º) Un gran acuerdo nacional sobre vivienda y suelo que conlleve mayor transparencia en el mercado inmobiliario. Supongamos ahora una persona, un hogar o una familia a la que no le llegan los ingresos para acceder a una VPO, pero que tampoco es susceptible de que le sea concedida una de las escasísimas viviendas públicas que construyen las administraciones. ¿Qué propone el PP para este tipo de demandante de vivienda? Nada.

Vamos al PSOE. Aquí la cosa es más complicada de ver. Las cosas en el PSOE siempre son más complicadas de ver. Si entramos en su web poniendo “vivienda PSOE” se abre una página confusa donde nos dan cuenta de lo siguiente: 1º) Un informe sobre el sector de la vivienda en España. 2ª) Creación de una plataforma social para el fomento de la rehabilitación de vivienda. 3º) Las familias con rentas medias tendrán ayudas para comprar vivienda protegida. 4º) La Ley que impulsa el alquiler y la eficiencia energética de los edificios da más seguridad a los arrendadores y protege los derechos de los inquilinos. 5º) La SPA (Sociedad Pública de Alquiler) triplica la cifra de contratos cerrados en febrero respecto al mismo mes de 2009. 6º) Cerca de 100.000 jóvenes reciben ya la ayuda de 210 euros mensuales para el pago del alquiler. 7º) Proyecto de Ley de Medidas de Fomento del Alquiler y de la Eficiencia Energética. 8º) Rodríguez-Piñero: “Mientras el PP sigue sin arreglar su casa, el Gobierno se la facilita a los ciudadanos”. Y 9º) El Gobierno compartirá el riesgo de los nuevos préstamos para la compra de vivienda protegida. O sea: un batiburrillo, muy propio del PSOE, donde se habla de todo y de nada a la vez, no vaya a ser que algo quede claro. Lo mejor, acudir al informe, donde (aquí sí) se centran en tres cosas: impulso a la VPO, impulso al alquiler, impulso a la rehabilitación. ¿Qué sucedería con ese “demandante” de que hablábamos antes? ¿Qué se dice para él? Nada tampoco.

Mejor será acudir a las llamadas “leyes del derecho a la vivienda”. Podemos ver la catalana o la andaluza (socialistas), y también la que está a punto de aprobarse en Castilla y León (popular). No vamos a analizarlas ahora. Tales leyes son avances respecto a la situación actual, nadie lo dude. Unas llegan más lejos (las socialistas), otras menos (la popular). Pero mi impresión es que se trata, en los tres casos, de una clamorosa oportunidad perdida. En ninguna de ellas ni siquiera se llega a definir en qué consiste el derecho a la vivienda. Lo he publicado hace unas semanas, y me remito a lo entonces dicho. Pero sintetizo los aspectos que me parecen fundamentales para mejorar la situación residencial. De todos, pero especialmente de ese demandante de que venimos hablando en este post, que es quien considero se encuentra en la peor situación para acceder a una vivienda:

1º. Debería enunciarse con toda claridad que todo el mundo tiene derecho a una vivienda, y que tal derecho es universal y personal.
2º. En consecuencia, debería definirse la vivienda, en principio, como un espacio personal con el cual un individuo llega a entrar en relación posesiva exclusiva reconocida como tal por la sociedad, o algo parecido.
3º. Es preciso separar suelo y edificación, a todos los efectos. Es necesario evitar que la mitad del coste de cada vivienda se vaya a pagar el suelo. (Esta medida es jurídicamente complicada, aunque posible sin ninguna duda. No obstante podrían aplicarse todas las demás propuestas aunque esta medida se dilatase en su aplicación; que por otra parte no tendría por qué ser maximalista, sino que cabría establecer fórmulas diferentes para situaciones inmobiliarias distintas).
4º. Una cuestión clave sería, en principio, la determinación de la superficie mínima a que se tiene derecho: un tema político fundamental que no se puede eludir (ya hemos dicho que en Cataluña se habla de 30 m2, y es una medida que parece más que suficiente).
5º. En principio, nada de establecer requisitos de calidad, por mucho que interese a las empresas inmobiliarias que oficialmente se diga que hay unas carencias enormes de vivienda porque los pasillos de las existentes tienen en algún punto menos de 90 cm., por ejemplo.
6º. Es preciso garantizar las condiciones de calidad (ahora sí) de los servicios y redes técnicas, de manera que a pie de parcela (o de cada alojamiento, cuando se trate de edificios en altura: aplicaremos la “teoría del soporte”), se encuentren las redes de agua, saneamiento, energía, comunicación, etc., a las que puedan acceder los ciudadanos desde sus casas.
7º) Hay que establecer el compromiso público de que las distintas áreas residenciales de la ciudad estén equilibradas desde el punto de vista urbanístico. Pues sabemos que para la calidad de la vivienda importa más la calidad del entorno que la propia materialidad del alojamiento. Por eso es precisa una política urbanística tendente a distribuir adecuadamente en toda la ciudad los centros y edificios públicos, e incentivar la distribución de los privados de forma equitativa; a equilibrar los usos apetecibles y los rechazables entre todas las áreas por igual; a mezclar los tipos de viviendas en todos los espacios.
8º) Es necesario promover amplias operaciones de rehabilitación en barrios y en edificios, facilitando el mantenimiento de la población, evitando su expulsión (forzada o incentivada) para conservar otra de las mayores riquezas de la residencia: el tejido social que la envuelve. Es decir: “llevar ciudad adonde está la gente”.

Todo lo cual supone una inversión en vivienda mucho mayor de la que ahora llevan a cabo las administraciones públicas españolas. ¿De dónde saldrían los fondos necesarios? De otras partidas, desde luego. Por ejemplo, de las inmensas, derrochadoras, innecesarias y perjudiciales inversiones en grandes autovías y trenes de alta velocidad.

Foto de cabecera: MS.

3 comentarios:

davigon2 dijo...

Varios puntos sobre la vivienda

En mi opinion habria que centrarse en reformar/rehabilitar las casas de los barrios, mas que en hacer nuevos bloques de edificios.

- No me parece sostenible que una ciudad que mantiene mas o menos los mismos habitantes duramente los ultimos años sea cada vez mas y mas grande, porque si a los barrios nuevos se les dota de los mismos servicios (y hay que dotarles de esos servicios) suponen cada vez mas gastos y a la larga como el numero de personas es el mismo, la calidad de los servicios empeorara, y si no se les dota de los servicios necesarios, pues todavia peor.

- Para finalizar, no se exactamente como funciona el tema de la vpo. No se si en todos los casos es la administracion publica la que cede de forma gratuita el suelo, o se se lo deja a la constructura a un precio muy reducido, etc, pero en mi opinion si es que si la administracion cede gratuitamente el suelo, deberia de imponer directamente el precio de los pisos que se van a construir en ese solar, y una vez fijado el precio de los pisos, que se sacase a subasta publica para ver que constructoras estan dispuestas a construir las viviendas por ese precio, y no que sea al reves y sean las constructuras las que fijen el precio de los pisos de vpo.

Gracias

Manuel Saravia dijo...

Tienes toda la razón en lo que comentas de la necesidad de primar la rehabilitación sobre la obra nueva, y también en la valoración del coste social de la extensión indiscriminada de la ciudad. Totalmente de acuerdo. Respecto a las VPO te diré que no siempre pone el suelo la administración, pero que siempre, por ley (por eso mismo son protegidas) tienen limitado el precio de venta y de alquiler. El problema surge, a veces, cuando te venden con la vivienda otros elementos que no están "protegidos" (¿recuerdas el caso de la 2ª plaza de garaje en Los Santos-Pilarica?).

davigon2 dijo...

Pues sobre Los Santos-Pilarica no estoy muy informado, pero se por experiencia propia, que esa misma situacion a ocurrido en los chalets de vpo de La Galera, asi que supongo que sera una practica generalizada.
Tampoco acabo de entender como puede ser que para acceder a un piso de proteccion oficial (el caso de La galera) te obliguen a tender unos ingresos iguales o superiores a 24000€ anuales. Es verdad que esos pisos de vpo son chalets, pero se supone que las vpo son para gente de pocos recursos, cobrar mas de 24000 Euros y poderte comprar un chalet para mi choca con el sentido de las vpo

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